Escrito por: Foto: Andina
El derrame de petróleo en la costa de Perú que superó los 10,000 barriles, una negligencia que se cobró la fauna y seguirá afectando vidas.
El 15 de enero de este año ocurrió el peor desastre ecológico ocurrido en Lima y Callao, el derrame de casi 12.000 barriles de petróleo de la empresa Repsol en el mar peruano. Este suceso cambió por completo la vida de muchos pescadores y sus familias. Aquellos que se dedicaban no sólo a la pesca artesanal, sino también del turismo que se deleitaba con el paisaje de sus bellas playas y de los manjares marinos que ofrecen sus restaurantes.
Esto no solo detuvo la economía local sino que la peor parte se la llevó la flora y fauna del litoral peruano. Por eso, una semana después de lo ocurrido el Ministerio del Ambiente declaró en emergencia ambiental el área geográfica afectada por el derrame de petróleo por 90 días calendario, mediante la Resolución 021-2022-Minam.
Sin embargo, la empresa petrolera sigue sin reconocer su responsabilidad en la catástrofe y se limitó a ofrecer canastas de víveres para las familias afectadas, bonos de 500 soles (118 euros) y el empleo de los trabajadores del mar en las labores de saneamiento, lo cual suscitó la indignación de muchos. Debido a que los pescadores encima debían exponer su salud y vida para limpiar un desastre que no habían ocasionado.
Normativa alrededor del desastre
Hace unos días se cumplieron 3 meses del derrame en la costa peruana. En este punto es necesario señalar que conforme lo dispuesto por el numeral 22 del artículo 2 de la Constitución Política del Perú toda persona tiene derecho a gozar de un ambiente equilibrado y adecuado al desarrollo de su vida, siendo un bien jurídico medular a ser tutelado por el Estado.
El abogado ambientalista, Mauricio Cuadra, nos comenta que a raíz del desastre, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) de Perú “abrió un proceso sancionador contra la compañía y ha establecido un conjunto de medidas que Repsol debe realizar”. Además, frente a las infracciones administrativas en materia ambiental, el artículo 136 de la Ley N.º 28611, Ley General del Ambiente establece que las sanciones pueden llegar a treinta mil (30,000) UIT. Así, en este caso en particular se calcula que la multa podría ascender a 226 millones de soles.
Además otra de las medidas que se tomó en este caso fue que el Poder Judicial dictó impedimento de salida del país por 18 meses a cuatro representantes de la multinacional, incluyendo a Jaime Fernández Cuesta, su gerente general. Esto, tras acoger el pedido de la Fiscalía en medio de las indagaciones penales. Adicionalmente, el OEFA, adscrito al Ministerio de Ambiente, dispuso que las operaciones de carga y descarga de hidrocarburos por parte de Repsol queden paralizadas temporalmente.
Según el especialista, estas entidades han establecido las medidas de manera correcta, pero ratifica en el hecho de que estas instituciones no solo “deben dictarlas sino también fiscalizar su cumplimiento” para una rapidez en este proceso sancionador. Debido a que estas medidas correctivas se realizan al final de la investigación y pueden tardar meses hasta que se ejecute.
Impacto Social y natural
El vertido de crudo ha matado decenas de especies marinas y a aves que solían aterrizar en las playas para alimentarse. Cadáveres de pingüinos de Humboldt, pelícanos, zarcillos, piqueros y golondrinas han varado en las orillas. Se estima que un 40% de animales rescatados no sobrevivieron a la contaminación de sus cuerpos.
Además, expertos han alertado sobre la pérdida de rastro de lontras felinas, una especie de nutria que ya se encontraba amenazada y en peligro de extinción local. Cabe destacar que la contaminación también se detectó en islas consideradas como áreas naturales protegidas perjudicando un total de 24 playas siendo así casi dos millones de metros cuadrados de mar.
El tiempo de recuperación del medio fue estimado entre seis y diez años según algunos expertos, aunque el periodo será menor para su uso público, ya que se podrán usar las playas y los pescadores retomarán su trabajo el próximo verano.
Sin embargo el nivel de afectación es de alrededor de 3,000 familias. Según Mauricio Cuadra, “las personas que viven de lo que les proporciona el mar no podrán trabajar en el mediano plazo”, por lo que esos daños pueden afectar a una generación de estos peruanos.
Si quieres saber más información en relación a este tan impactante caso, visualiza el videocast en el que encontrarás la entrevista que se realizó al abogado ambientalista Mauricio Cuadra.
