Escrito por: En un pueblo ubicado a más de 3 000 m.s.n.m., Sendero Luminoso marcó el inicio de una guerra interna entre el grupo de los civiles, los grupos subversivos y las fuerzas del orden.
Escribe: Milagros Maccha
Luego de doce años de dictadura militar (1968 – 1980), el sábado 17 de mayo de 1980, en víspera de realizarse las primeras elecciones democráticas, miembros de Sendero Luminoso robaron y quemaron las ánforas y padrones electorales que se encontraban en un almacén en Chuschi, un pueblo ubicado en la provincia de Cangallo, en Ayacucho. Ese día, Sendero Luminoso dio inicio a lo que denominó “lucha armada”.
El informe final de la Comisión de la verdad y reconciliación (CVR) señala que el periodo de violencia que atravesó nuestro país constituye un Conflicto Armado Interno (CAI). Asimismo, la CVR estima que la cifra más probable de víctimas fatales de dicha violencia es de 69 280 personas y que en Ayacucho se concentra más del cuarenta por ciento de muertos y desaparecidos.
Inicios del CAI
Para 1980, la desigualdad era muy notoria en el Perú , especialmente en las zonas rurales, las cuales se encontraban abandonadas. Según la CVR, la Región Sur-Central (Ayacucho, Huancavelica y Apurímac) que es el territorio mayoritario de comunidades pobres, quechua hablantes, con muy débil presencia estatal y con marginal integración a los mercados, fue el escenario original del CAI y la región donde se constata la mayor cantidad de muertos.
De acuerdo con el historiador Michael Mendieta, Sendero Luminoso consideraba que el sistema democrático era absurdo, pues el voto solo era una forma de engaño a la ciudadanía. “Este hecho que es conocido como la quema de ánforas fue una acción simbólica con la cual estaban tratando de plantear a la gente que el orden democrático no servía. A través de esa acción, estaban mostrando una forma de ‘educar’”, afirma.
Cobertura de los medios
Este hecho pasó desapercibido para el país y los diarios de la época, puesto que solo dos periódicos lo informaron: La Prensa y El Diario de Marka. El primero presentó el suceso como un atentado realizado por un grupo que incendió los padrones y ánforas de 10 mesas electorales. El segundo mencionó que se había dado un asalto a la oficina por elementos desconocidos y que un nuevo material electoral había sido enviado para que el sufragio suceda sin problemas.
El Conflicto Armado Interno había empezado, pero pocas personas se enteraron hasta mucho tiempo después. Incluso, el propio Gobierno de Francisco Belaunde Terry desconocía lo que estaba ocurriendo en la sierra del Perú. Muestra de ello fue que, tras ser interrogado sobre los actos cada vez más violentos de Sendero Luminoso, el ministro del Interior, José María de la Jara, calificó a los terroristas de “abigeos” (ladrones de ganado).
Fin del CAI
Según Mendieta, Sendero Luminoso es derrotado militarmente cuando Abimael Guzmán es capturado el 12 de septiembre de 1992. Este hecho significó el inicio de la decadencia de la organización, la cual se desarticuló, finalmente, en 1999, con la captura de Óscar Ramírez Durand, alias “Camarada Feliciano”, gracias a los policías de la Dirección contra el terrorismo (Dircote), la cual fue creada por el expresidente Alan García.
“Es interesante mencionar que el GEIN (Grupo Especial de Inteligencia) fue capacitado por la CIA (Agencia Central de Inteligencia). Las personas que llegan a capturar a Guzmán fueron capacitadas primero por agentes de la CIA. Pero no se habla mucho del papel de Estados Unidos en la guerra subversiva. El papel que tiene Norteamérica en el tema de la violencia es clave”, señala el historiador.
En el siguiente podcast, conoce más sobre el Conflicto Armado Interno junto al historiador Michael Mendieta.
https://soundcloud.com/milagros-maccha-arenas/posta-informativa-ii
