El estado de emergencia decretado por el Ejecutivo a causa del coronavirus obligan a al luchador a modificar sus planes de trabajo.
Pool llegó a la final del Preolímpico y clasificó a los Juegos Olímpicos del próximo año en Tokio. (Fotografía: ANDINA)
Escribe: Sebastián Socla
Luego de haber clasificado a los Juegos Olímpicos de Tokio y de su postergación debido a la crisis provocada por el COVID 19, el luchador peruano Pool Ambrocio se entrena en el segundo piso de su casa debido al aislamiento social obligatorio dictado por el Gobierno.
“Entreno a dos turnos en mi casa. Tengo colchonetas y pesas. Además, practico con mi hermano que es seleccionado nacional. Debo aprovechar esta ventaja al máximo”, señaló Ambrosio, quien, tras haber obtenido su clasificación en Canadá, pasó su cuarentena en un hotel de la capital.
Lamentablemente, el cierre de fronteras anunciado por el presidente Martín Vizcarra le impidió retornar al país y celebrar su clasificación. “Nuestro vuelo era a las 12:30 y se pasaba por media hora. Regresamos al hotel y conversamos con la embajada, que nos dio una casa con todo lo necesario”, declara Pool, agradecido por el apoyo brindado.
En territorio norteamericano, el luchador peruano alcanzó dos medallas de plata en la categoría 86 kilos. Una en el Campeonato Panamericano Sénior y otra en el Preolímpico. “Estaba en una situación definitoria, sabía que debía llegar a la final para clasificar. No tenía otra oportunidad, era ahora o nunca”, señala el atleta.
Pese a no competir en la final de este último torneo debido a una lesión, la presea obtenida le otorgó un cupo en el evento deportivo más importante del mundo. “Conversé con el comando técnico y me convencieron de no continuar, era mejor guardarme para los JJ.OO”, acotó.
En el año 2016, Pool estuvo cerca de clasificar a Río de Janeiro; sin embargo, un descuido en el último minuto de la pelea le impidió cumplir su sueño. Cuatro más tarde, Pool no dejó que la desesperación lo domine y pudo conseguir un triunfo histórico para el país, que vuelve a tener un representante en esta disciplina tras la participación de Félix Isisola en Atlanta 1996.
Como no es parte del programa del IPD “TOP PERÚ OLÍMPICO”, tuvo que costear por cuenta propia su viaje. “Busqué ser enviado a Rusia pero me dijeron que solo funcionaba con deportistas clasificados a los Juegos Olímpicos o los que habían obtenido mejores resultados”, comenta Ambrocio, quien se mostró incómodo por esta situación luego de haber obtenido importantes logros en su carrera.
En Rusia, pudo entrenar con los mejores luchadores del mundo y recuperó la confianza perdida a causa de las lesiones que lo complicaron durante gran parte del año 2018, donde llegó a ser número 8 del ranking mundial.
Con más de un año para el inicio los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, Pool indica que la postergación le permitirá llegar mejor preparado y que su meta está fijada. “Mi objetivo es la medalla olímpica, soy uno de los candidatos y ellos lo saben”, finalizó.