Actualmente, el exmandatario cumple prisión preventiva por el fallido autogolpe de Estado y presuntos actos de corrupción. (Foto: Andina.pe).
Según denuncia constitucional formulada por la fiscal de la Nación, los oficiales se reunieron con el expresidente en Palacio de Gobierno con el fin de ser promovidos y modificar el criterio de los ascensos.
Por Iván La Noire
El expresidente Pedro Castillo ascendió indebidamente a 10 oficiales al grado de general de la Policía Nacional del Perú (PNP) con fines políticos, según la denuncia emitida el 11 de agosto por la fiscal de la Nación, Patricia Benavides. Dichos oficiales mantuvieron entrevistas privadas con el ex mandatario en Palacio de Gobierno. Además, se menciona que el propósito de Castillo era obtener el control dentro de la PNP a través del entonces comandante general, Javier Gallardo Mendoza.
Según la Fiscalía, el motivo de las visitas realizadas por los oficiales no correspondía a las diligencias propias de su labor, por lo que dichas entrevistas habrían sido realizadas para gestionar su ascenso de forma indebida. Al respecto, Carlos Serván, abogado y ex miembro de la Policía de Investigaciones del Perú, comenta a Punto Seguido:
“Castillo, al ser presidente, ya tiene cierto control sobre las Fuerzas Armadas y Policiales, pero dentro de la Constitución. Lo que él buscaba era tener personal que lo resguarde en caso de que hiciera un golpe de estado. Para eso, debía ascender a gente que le fuera leal y sacar a los que pudieran estorbarlo”.
La denuncia de la fiscal Benavides señala que Gallardo Mendoza formó parte de la presunta organización criminal liderada por el expresidente Castillo. En este sentido, favoreció a diversos oficiales de la PNP a través de la elaboración de una nueva directiva que reguló el proceso de los ascensos. Para ello, variaron los puntajes para el ascenso al grado de general, lo que le habría permitido gestionar los puntajes a su favor.
“Cuando se evalúa, es muy difícil saber quién puede ascender a general, porque se presentan 80 y solo ascienden 10. Para ascender a más personas, se puede dar salida a generales para que entren nuevos. Lo que hizo Castillo fue retirar a varios buenos generales para poder ascender a otros”, explica Serván.
El documento emitido por la fiscal detalla que el ahora ex comandante de la PNP habría “promovido la elaboración de una directiva que regule el proceso de selección, mediante la cual se otorgue mayor poder discrecional en las evaluaciones al alto mando policial, lo cual no podría darse de otra manera que elevando el puntaje de indicadores subjetivos como la entrevista personal”.
A pesar de ello, Serván explica que lo hecho por Gallardo Mendoza no es ilegal. “Ha sido irregular, pero eso no es un delito”. En relación a la entrega de sobornos, menciona que sí constituye un delito, pero hasta el momento no hay pruebas contundentes. “Los oficiales dicen que no han dado nada y el comandante general dice que no ha recibido nada. De momento, es difícil saber”, finaliza el abogado.
Al respecto, el exministro del Interior, Mariano González, declaró para La República que Castillo estaba interesado en tener el control total de la PNP a través de oficiales de confianza para evitar que sus familiares investigados por corrupción sean ubicados y detenidos.