Foto: Francisco Erazo
Pese a estar declaradas en emergencia, Pataz y Trujillo ejecutan menos del 15 % en el resguardo público. Además, no cuentan con planificación para enfrentar la inseguridad.
Escribe: Francisco Erazo
Giacomo Puccio, investigador de la Red de Estudios para el Desarrollo (REDES), señaló que el aumento de la inseguridad ha hecho que los pobladores de Pataz y Trujillo , se muden de sus hogares a otros distritos. El 14 de febrero, el gobierno peruano oficializó el estado de emergencia por 60 días en dichas provincias de La Libertad. La decisión fue tomada después de una ola de delincuencia en ambas localidades norteñas.
Frank Casas, especialista en seguridad ciudadana, anotó que los problemas para hacer un buen uso del recurso público, provienen de una ausencia de planes para enfrentar la inseguridad y de una “falta de liderazgo” en las municipalidades para enfrentar la inseguridad, además de sufrir de la corrupción.
En una reciente conferencia de prensa del gobierno regional de La Libertad, se dio a conocer que se han ejecutado 421 operativos y detenido a 205 personas. Sin embargo, Trujillo y Pataz mantienen una baja ejecución presupuestal para combatir la inseguridad. Según el Portal de Transparencia del Ministerio de Economía y finanzas (MEF), Trujillo recibió 30 millones de soles para la reducción de delitos y faltas que afectan la seguridad ciudadana, de los cuales solo ha ejecutado un 8 %; Pataz por su parte, recibió cerca de 2 millones de soles y solo ha ejecutado un 10.4 %. “Hay algunas deficiencias al momento de los procesos de gestión (…) lo mismo que pasa con los proyectos de inversión pública”, agrega Puccio.
Por otro lado, este investigador de REDES, anota que si existiese un “patrullaje periódico integral en toda la ciudad, si puedes reducir considerablemente las cifras de criminalidad y, por lo tanto, aliviar mucho la situación de las personas”.
Según el último estudio de IMA GO!, los pobladores se sienten más vulnerables en El Porvenir y Mercado Hermelinda. Sobre ello, Puccio apunta que los patrullajes en las zonas “calientes” sirven, pero se corre el riesgo de que “el crimen pase de una esquina a la otra o por donde la policía no pasa”. El mismo estudio, revela que un 18 % de los encuestados gasta más de lo habitual para ser víctima de robo, “demuestra que nos ha tocado ver soluciones desde el lado individual”, sentencia Puccio.
En marzo del 2023, el gobierno regional de La Libertad aprobó la compra de 40 camionetas pick up 4×4 y 20 motocicletas equipadas con tecnología y equipo policial táctico por un valor de 10 millones de soles. Hasta la fecha, dicha entidad encabezada por Cesar Acuña, solo ha ejecutado un 3 % del presupuesto destinado a la compra. Cabe indicar que, de acuerdo al gobierno regional, gran parte del equipo sería dirigido a comisarías de Trujillo y Pataz. “No hay evidencia de que tener más cámaras, serenazgos, vehículos o patrullajes, va a implicar mayor seguridad”, agrega Casas. Además, según el experto, en muchas ocasiones las compras de equipo se suelen hacer “sobre la base de una especulación”.
Un estudio del Banco Interamericano para el Desarrollo, estima que al Perú le cuesta 2.8 % de su PBI al año combatir la inseguridad. Según Casas, existe un gran problema estratégico en el país para saber lo que se tiene que invertir e implementar en seguridad ciudadana. “Se desconoce realmente lo que se tiene que hacer”, enfatiza.