Por: Michelle Linares
Foto: Organización Ficus
En el 2014, un grupo de estudiantes universitarios de distintas carreras se juntaron para mejorar Lima y sus alrededores creando Ficus. El propósito de esta organización sin fines de lucro es mejorar el medio ambiente promoviendo el desarrollo sostenible mediante diversas actividades ecológicas
Este innovador proyecto se financia gracias al premio Direct Aid program (DAP) 2014 de la embajada de Australia. Asimismo, también fueron galardonados con el premio Ideas Voluntarias 2014 del grupo financiero Credicorp, el cual remuneraba a voluntariados que desarrollasen actividades en favor de la comunidad. Por último, también han aparecido en diferentes medios de comunicación.
https://www.youtube.com/watch?v=mVWr4DcOfcQ&list=PLuvL6beodU8NiFzmR9-Z4PK8wqpmxg7O5&index=50
Biohuertos, huertos y otros accesorios
Ficus realiza sus voluntariados en el asentamiento humano Las Praderas en San Juan de Miraflores. Allí realizan actividades como «compostaje»(abono), el cual enseña a crear fertilizante desde los residuos orgánicos de los vecinos. Estos los recolectan y convierten en abono para plantas aledañas y un biohuerto que han diseñado con los pobladores de la comunidad. «Lo que buscamos es reducir la quema de basura porque actualmente no hay un sistema adecuado de eliminación de desechos», señala una voluntaria.
También trabajan en el asilo de adultos mayores San Vicente de Paul (de la Sociedad de Beneficencia de Lima Metropolitana) en Barrios Altos, donde han implementado un biohuerto, el cual los adultos mayores han aprendido a cuidar. A su vez, han impartido talleres para instruir al personal de la cocina a usar los productos del biohuerto para cocinar y crear abono a partir de lo restante.
En el colegio Fe y Alegría N° 65 también han construido un invernadero. Además de realizar talleres regulares para aprender a hacer invernaderos propios y sostenibles, en la escuela enseñan cómo hacer composta casera, inventos para usar como fuente de agua y cines fórum sobre el impacto ambiental.
Foto: Organización Ficus
Inventos reciclados
Composta, plástico, basura se reciclan a diaro para diferentes usos. A partir de ello, uno de los instrumentos que se ha enseñado a hacer es el «atrapanieblas». Como lo indica su nombre, ese objeto es usado en zonas altas, de mucha neblina, como fuente de agua. Está compuesto de una malla de raschel (reciclada, que se usa en construcciones) desde la que gotea la neblina condensada hacia un reservorio que guarda el agua del día.
Todos son bienvenidos para ayudar
«Hay un niño de 12 años que se llama Daniel que nos acompaña cada Domingo. Sin falta. Es bacán ver a los niños que también están comprometidos con mejorar su espacio», comenta Camila Sattler, integrante de Ficus.
Todos los domingos tienen las «jornadas verdes». De 8 de la mañana al mediodía se reúnen los voluntarios con el equipo de Ficus para ir a los asentamientos y dictar talleres. Para asistir sólo es necesario inscribirse en su página web: http://ficus.org.pe/