Rolando Febres, consultor de energías renovables, creó la primera bicicleta electrosolar del país en cuatro meses.
Redacción: César Reyna
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Rolando Febres descubrió el potencial de las energías renovables hace más de 20 años, cuando estudiaba Ingeniería Mecánica en la Pontíficia Universidad Católica del Perú (PUCP), cuando aún los equipos no eran eficientes y los proyectos estaban lejos de ser viables y rentables. Sin embargo, en la actualidad, las energías renovables son una oportunidad frente a la contaminación y al cambio climático. Por esta razón, Febres adaptó una bicicleta a un sistema de captación de energía solar con el objetivo de presentar una solución frente al caos vehicular y de demostrar la factibilidad de las energías renovables.
La bicicleta cuenta con un motor Brushless de imán permanente, que fue modificado por Febres para que sea más potente. Tiene además 4 baterías de 12 amperios-hora cada una, que soportan los 48 voltios que requiere el motor. El cargador, que está hecho de manera artesanal, condensa la corriente del panel solar, que recarga en un día soleado hasta el 50% de energía.
El próximo año, el ingeniero Febres piensa desarrollar junto a su equipo de trabajo la primera motocicleta eléctrica solar y el primer vehículo peruano totalmente eléctrico-solar.
