El analista político Pedro Tenorio considera que se ha generado una controversia política de un tema que debió mantenerse en el ámbito técnico.
Redacción: Alexandra Ojeda.
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Familias no censadas, convenios con universidades privadas vinculadas a la política y hasta la violación sexual de una empadronadora fueron los principales cuestionamientos que recibió la planificación y ejecución del Censo Nacional 2017 a cargo del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI), y que llevaron a su jefe Aníbal Sánchez a renunciar el pasado martes.
Para el analista político Pedro Tenorio, la responsabilidad de este hecho recae en la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM), a cargo de Mercedes Aráoz. “Al ser el INEI un organismo público que depende de la PCM, y al haber participado el presidente y sus ministros en el nombramiento y remoción de los funcionarios públicos del INEI, a ellos afectan directamente estos errores que pasaron del ámbito técnico al político”, aseguró.
En ese sentido, Tenorio considera que las consecuencias de esta controversia dependerán de la nueva elección del jefe de dicha institución. “Será una decisión que va a ser monitoreada por sectores políticos, académicos y especialistas que ven con desconfianza lo que el gobierno puede hacer en este punto”, afirmó.
Debido a que Aníbal Sánchez no fue nombrado como jefe del INEI, sino únicamente como encargado de su jefatura, este continuará con las labores que venía realizando en esta entidad bajo el cargo de subjefe.
