Redacción: Jairo Sotelo Ramos
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La suerte decidió que precisamente, a cien años de la muerte del recordado periodista y dramaturgo Leonidas Yerovi, se estrenase esta puesta en escena inédita que escribió y que su bisnieto Mateo Chiarella decidió montar en el Teatro Ricardo Blume. “No existe constancia que ‘La pícara suerte’ se haya presentado acá en Lima. Todo esto me parece una cosa del destino, que nos ha estado escondiendo este material por todo este tiempo y ha decidido sacarlo justo ahora” comenta el director de la obra que estará disponible hasta el próximo 10 de julio.
Mateo encontró hace siete meses los manuscritos originales de esta historia teatral que fue escrita por Yerovi mientras se encontraba en Buenos Aires en 1914. En aquel entonces, su bisabuelo decidió montarla en la capital argentina, ciudad que lo acogía momentáneamente. “En esa época las temporadas no duraban dos meses como ahora, sino se presentaban solo un fin de semana. Entonces únicamente se pudo ver la obra unos 4 ó 5 días”, cuenta Chiarella. Aunque este último logró hallar los escritos reales, no pudo encontrar el guión completo. “Yo he completado algunas escenas que todavía están perdidas, pero mi trabajo habrá sido el 5 por ciento de la historia”, comenta el director. Y agrega: “Lo único que hice fue terminarla, darle una estructura final”.
– Pícaro destino –
Esta puesta en escena protagonizada por los actores José Dammert, Ramón García y Lilian Nieto, nos relatará las aventuras de Felipe, un joven que acaba de caer en la bancarrota y que decidirá jugar la ruleta para dar vuelta a su miseria. Sin embargo, la suerte se interpondrá en su camino y hará hasta lo imposible para que no sobresalga en aquella sociedad acriollada en la que vive, que se encuentra colmada de prejuicios.
A Mateo siempre le ha llamado la atención este carácter trágico en los escritos de Yerovi. “Lo interesante de las obras de mi bisabuelo es que hace de la suerte un personaje que se escabulle, un socarrón que se vuelve probablemente en el antagonista de la historia”. Este carácter trágico y casi inevitable no tenía una finalidad trivial: Leonidas lo colocaba como una mera crítica a la opresión del sistema. “Él nunca lo puso en términos tan radicales. De hecho que le llame ‘La pícara suerte’ le da al azar un carácter juguetón, casi infantil”, destaca Chiarella. Y acota: “Esta historia lo que hace es dibujar las circunstancias en las que estamos inmersos los peruanos. Por propias actitudes o comportamientos, como por supuesto también por un sistema que le es adverso muchas veces”. Ante esto no duda en hacer hincapié en el rol que juega la superstición en nuestro contexto, factor que incluso tendrá gran importancia en la puesta en escena. “Personas que no trabajan si no que prefieren apostar a la lotería, a los caballos, a la ruleta. Eso es bien interesante y es muy propio de nuestro país”.
Lo cierto es que la suerte es un tópico presente tanto en la vida de Yerovi como en sus escritos y esta obra buscará hacer un homenaje a ello. En palabras de Mateo Chiarella, este montaje significa el momento central de la conmemoración del centenario de la muerte de su bisabuelo. “Él siempre tuvo muchos seguidores. Me da gusto poder entregarle a esa gente un material inédito”.
