Punto Seguido llegó hasta Pucallpa para conocer a Jorge Sanjinez, el peruano que luchó en la Segunda Guerra Mundial.
Escribe: Aldo Vicuña
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Con 102 años de edad, el incesante calor de la región Ucayali no impidió que este veterano reviviera sus memorias bélicas. Fue a sus 25 años cuando acudió a la embajada belga en Lima motivado por un amigo, ya que siempre quiso ser soldado: “En la guerra matas o te matan. El miedo es a quienes dejas en tu casa. Yo no tenía a nadie esperándome en casa, por eso no tenía miedo”. Se enroló en las filas del ejército de la Bélgica libre zarpando del Callao en enero de 1943 hacia el Reino Unido para reunirse con los demás integrantes de su compañía.
Sanjinez formó parte de la brigada Pirón desembarcando en Normandía el 7 de agosto de 1944 en la playa de nombre en clave ‘Juno’. Tras superar lo que para él fue la etapa más difícil que pasó en la guerra – el desembarco-, avanzaron junto con las tropas británicas tierra adentro contribuyendo con la liberación de Francia, Bélgica y los Países Bajos. Combatió hasta el final de la guerra volviendo al Perú en enero de 1946.
El veterano recuerda el ruido ensordecedor de la artillería enemiga y las miles de balas que sus adversarios disparaban contra él y su brigada. Quedó marcada en su memoria por siempre el ver a sus compañeros despanzurrados, mutilados o muertos en el campo de batalla. Supo manejar el miedo, pero una vez acabado el conflicto bélico vivió atormentado buscando darle un sentido a su existencia y sobrevivencia.
Hoy vive feliz junto con su esposa Meldin, 44 años menor que él, y su mascota ‘Chihui’. En agosto regresará a Europa para asistir a las conmemoraciones de la liberación de Bélgica 75 años después.
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