El quechua se enfrenta y hace frente a un país de prejuicios y discriminación para evitar su desaparición. Por lo que su enseñanza en las escuelas urbanas, certifica que esta lengua se niega a morir.
Escribe: Bryam Esquen
En el Perú, existe una problemática que es la discriminación. Como parte de esa discriminación, existe la discriminación lingüística contra las comunidades quechuas, aymaras y lenguas amazónicas. Por lo que, muchas de estas personas crecen con un cierto rechazo de tener una comunicación en lenguas indígenas.
De acuerdo con Carlos Flores, antropólogo y profesor, quien habló en su columna de opinión en la revista Noticias SER que, “en los últimos 50 años el Ministerio de Educación nunca ha reservado ni tenido un presupuesto especial para lograr una educación en la que nuestros niños y jóvenes lleguen a ser bilingües coordinados que lean y escriban en quechua y tengamos libros, revistas, bibliotecas en nuestra lengua originaria”
Sin embargo, en los últimos años ha existido una revaloración del quechua, manifestado en la música y otros medios. Según Virginia Zavaleta, antropóloga y docente en la Pontificia Universidad Católica del Perú, publicó en la revista Tarea que, “la enseñanza del quechua en áreas urbanas por lo general recibe el apoyo de los padres y madres de familia, sobre todo de aquéllos que ya son profesionales y que no tienen el miedo de que el quechua “malogre” el castellano de sus hijos”.
Esto se debe a que, a diferencia de otras generaciones, ahora los niños y las niñas se entusiasman por las clases de quechua, buscan a los docentes en sus horas libres y se acercan al salón de clase a la hora del recreo para consultar los libros en quechua. De acuerdo con Zavaleta “Cuando se les pregunta por qué quieren aprender la lengua, señalan razones como las siguientes: “porque mi abuelita habla quechua y quiero hablar con ella”, “porque mi mamita también habla quechua y a veces no la entiendo”.
De acuerdo con Frances Kvietok, profesora y lingüista, menciona en una publicación realizada para la Universidad de Harvard que, una forma de incentivar la enseñanza del quechua en las escuelas urbanas es doblar personajes de series y películas infantiles. Relata que, “Doblar personajes al quechua implicó no solo habilidades orales en la lengua – las cuales habían sido invisibilizadas o menospreciadas en las aulas anteriormente – sino también demostrar destreza artística verbal. Esto significaba no necesariamente doblar Nemo del castellano al quechua, sino ser Nemo en quechua”.
Sin embargo, fue el uso de medios digitales lo que contribuyó a obtener una motivación para el aprendizaje en quechua. “Al utilizar el video como un recurso didáctico, se desestabilizaron representaciones del quechua como incompatible con la tecnología, agregó Kvievtok.