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Cada vez son más las empresas que se suman a crear su propia plataforma de streaming. Una industria que ya se había posicionado con fuerza con el crecimiento de Netflix y se disparó a partir de la llegada de la pandemia.
Escribe: Bryan Poma
¿Qué es?
El término Streaming refiere a la tecnología que transmite a tiempo real datos de archivo; ya sean musicales, de texto o video, a través de Internet y que no sea necesario descargar este contenido. Si unimos este concepto a la enorme variedad de producciones de entretenimiento que existe en la red, tenemos como resultado una industria que no hace nada más que crecer.
Hoy en día hay servicios de streaming para todo tipo de usuarios. Quienes buscan entretenimiento de series y películas novedosas o de antaño directamente pensarán en Netflix o Disney +; aquellos que sean fanáticos de las producciones de Warner Bros o DC, disfrutarán de HBO Max; los que hayan sido seguidores de las producciones de Nickelodeon, disfrutarán de Paramount+, los amantes de los deportes ahora pueden acceder a las principales ligas deportivas a través de Star+; e incluso los aficionados del mundo del manga y el anime tienen una plataforma para ellos, como Crunchyroll.
Pero esta industria no se limita a plataformas que transmiten contenido audiovisual de su propiedad. Existen también plataformas que te ofrecen acceso a casi cualquier canción del mundo, como Spotify o Apple Music; u otras que permiten la creación y distribución de contenido de los propios usuarios, como Twitch. Tan suculento es este mercado que hasta el propio YouTube intenta, sin mucho éxito, tomar una tajada de este pastel con la creación de YouTube Premium, que te permite disfrutar del contenido exclusivo y evitar los molestos anuncios publicitarios. Se mire por donde se mire, esta industria no ha hecho nada más que crecer en los últimos años.
La pandemia: lo mejor que le pudo pasar a la industria
A raíz del confinamiento provocado por la pandemia del COVID-19, nuestra capacidad de elección quedó muy limitada en cuanto a qué actividades podíamos realizar. En este contexto tan atípico, el internet y los dispositivos donde podemos acceder a él aumentaron su indispensabilidad. Los servicios de streaming, que ya presentaban un crecimiento importante en los últimos años, se dispararon a raíz de esta coyuntura. La plataforma Netflix ganó 26 millones de nuevas suscripciones en la primera mitad del 2020, una cifra que dista enormemente de los 12 millones de usuarios nuevos que ganó en los primeros seis meses del 2019. En los casos de Disney+ y Blim, crecieron un 24% en el primer año de la pandemia.
La industria del streaming fue la gran ganadora de la pandemia, su crecimiento meteorológico contrasta bastante con las pérdidas que tuvieron las industrias de entretenimiento con las que compite. Esto se refleja en los datos anuales de la consultora PwC México, que señala que los ingresos de la industria del cine cayeron un 80%, los de la música en vivo cayó un 26% y los de publicidad en exteriores un 31%. Según el director de análisis de Capital Group, Brad Barrett, esta industria no hará más que crecer en esta década: “Aproximadamente un tercio de todo el consumo de contenido se hace actualmente a través de plataformas de streaming, pero en 2030 creo que va a aumentar a más del 80%”
Invasión
El pastel se hizo tan delicioso que todos querían su pedazo. De la larga lista de plataformas de streaming que hoy tenemos en el mercado, mencionaremos algunos casos destacados: Netflix, que ya supera la barrera de los 200 millones de suscriptores, ha pasado de realizar siete producciones originales en 2016, a realizar treinta y dos en 2020. Por su parte, Disney+ alcanzó los 95 millones de suscriptores a poco más de un año de ingresar al mercado, algo sorprendente pues a Netflix le costó nueve años llegar a esta cifra. El contenido de la empresa del ratón se basa fundamentalmente en las series y películas clásicas de antaño que tanto nombre le dieron a la empresa, junto con contenido nuevo como las series que se desprenden del MCU (Universo Cinematográfico de Marvel) o las producciones del universo de Star Wars. La propia Disney compró a FOX en 2019 y le cambió el nombre a Star Chanel, de esto derivó la creación de Star+. Esta plataforma de streaming contiene las producciones más emblemáticas de la antigua cadena FOX, como: Los Simpson, Futurama o American Horror Story. Además, también tiene el contenido deportivo exclusivo de ESPN, cadena que también es propiedad de Disney. HBO Max también nació y se posicionó con fuerza por tener las producciones de DC, Warner Bros, CNN, TN, TBS, The CW, Cartoon Network, Adult Swim, entre otros.
Muchas de estas producciones han estado disponibles en televisión por cable. Antes, el usuario solo debía preocuparse por pagar por este servicio y ya disponía de contenido de entretenimiento variado de todas las cadenas que su servicio de cable le ofrecía. Hoy, casi todas tienen su servicio de streaming, por lo que el contenido se ha dispersado y el principal perjudicado es el bolsillo del usuario.