La industria de la alimentación se reestructurará luego de la pandemia si quiere seguir vigente.
Escribe: José Luis Góngora
Durante esta cuarentena debido al Covid 19, hemos aprendido a vivir bajo nuevas circunstancias. Diversos especialistas aseguran que este virus cambiará muchos hábitos nuestros de ahora en adelante y que tendremos un estilo de vida diferente. Según un estudio de la consultora Kantar, el 15% de personas en España redujeron su hábito de consumo. Cifra que sin lugar a dudas, afecta a los comerciantes del país. Similar situación sucederá en Perú. Uno de los principales medios de contagio es la transmisión de persona a persona a través de partículas y el contagio es mayor cuando hay gran cantidad de personas en un mismo lugar.
Si bien es cierto se conoce que el virus no resiste a temperaturas elevadas y es complicado que un plato recién cocinado sea una fuente de contagio. Sin embargo, los restaurantes donde se aglomeran las personas, es un foco de infección principal. Son los encargados de estos lugares los que tienen que reinventarse, para poder atender al público luego del confinamiento. Algunos restaurantes, han cerrado por tiempo indefinido. Otros, se han convertido en repartidores de alimentos de primera necesidad para lograr sobrevivir en esta época.
Muchas cadenas de comida, incluso, han apoyado la causa y han donado toneladas de alimento para abastecer a las poblaciones vulnerables. Empresas como KFC, Starbucks, Pinkberry, etc. han sido las creadoras de esta magnífica idea. ¿Pero qué pasará con todos los restaurantes una vez levantado el estado de emergencia?. La presidenta de la Asociación de Hoteles, Restaurantes y Afines (AHORA-PERÚ), Blanca Chávez, envió una serie de propuestas a los ministerios correspondientes, para que los restaurantes puedan realizar actividades vía delivery. La respuesta del ejecutivo fue negativa al asegurar que sería un caos el tránsito de vehículos motorizados.
En Lima, gran parte de la clientela diaria de restaurantes, son trabajadores que no pueden ir a comer a casa por distancia u otros motivos. Asimismo, personas que viven solas y les resulta más económico adquirir un menú que cocinar diariamente. Estas situaciones no se darán igualmente luego del levantamiento del estado de emergencia. Por el contrario, la salida de los trabajadores será de forma paulatina, así lo afirmó Martín Vizcarra. Entre tanto, el fin de la cuarentena parece cada vez más lejano y lo único cierto es que los restaurantes tendrán de que ingeniárselas para no desemplear a sus trabajadores y mucho menos verse en bancarrota.