Especialista en psicología explica y corrige término usado por la presidenta de la Comisión de la Mujer y Familia, Maritza García.
Redacción: Ximena Carrasco
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La congresista del partido Fuerza Popular Maritza García fue criticada la última semana por justificar los actos de violencia hacia la mujer. Estas declaraciones afirman que existe un ‘agresor sano’ que es sacado de contexto por frases como: “me voy” o “te estoy traicionando”. Estas expresiones causaron gran indignación en la población peruana, pues en los últimos años se busca erradicar los feminicidios.
Por ello, Dora Alva, especialista en criminología y psicología forense, analizó las polémicas palabras de la legisladora. Al hablar de agresiones se debe tener en claro que todo tiene una causa y consecuencia. Para la psicóloga, las mujeres no incitan al hombre a que cometa este tipo de actos, pero se ponen en riesgo cada vez que estos actúan de manera irracional. “Una discusión es de dos y es gradual, nunca se empieza con un acto de agresión. Si una persona ha detectado episodios de violencia en su pareja, lo ideal es que opte por alejarse”, explicó Alva.
Por otro lado, la experta afirma que el término de ‘agresor sano’ dentro de la psicología no existe. “A este tipo de casos se les llama ‘emociones violentas’, que a su vez se les puede considerar como conducta imputable cuando el suceso ha sido producto de un shock. Es decir, si un hombre encuentra a su pareja con otra persona, va a entrar en una situación de reacción impulsiva, pero no se considera ‘agresor’ cuando el sujeto no tiene antecedentes como celos exagerados, ser una persona absorbente o el consumo de sustancias ilícitas que le hagan perder el control”, desarrolló Alva.
Otro punto importante es que una mujer también pueda entender que no se le puede responsabilizar al 100% a la otra persona. Ello, como lo explica la especialista, “no quiere decir que se le excusa al varón, pero si uno de los lados sabe que su pareja es agresiva o intolerante a la frustración, dentro de uno mismo podemos predecir la respuesta de la otra parte”. En estos casos, es importante que cada persona sepa manejar su capacidad de resiliencia —saber que uno se puede caer y se puede levantar— para que de esa manera se puedan evitar conflictos de tal magnitud. Tanto el hombre como la mujer pueden terminar una relación y aquello no tiene porqué llevar a la agresión.