La propagación de la covid-19 ha evidenciado las carencias que sufren las mujeres trans ante la marginación ejercida por la sociedad peruana (Foto: Twitter Marcha del Orgullo LGTBI de Lima)
El poco reconocimiento y respeto hacia el sector trans de la comunidad LGBTI se ha visto evidenciado aún más durante la emergencia sanitaria con situaciones de violencia y acoso por parte de instituciones del Estado hacia el colectivo.
Escribe: Juan Diego Espinoza
Un estudio realizado por IPSOS a pedido del Ministerio de Justicia reveló que hay un 8% de personas LGBTI en el país, lo que equivale a 1,7 millones de peruanos adultos. El sondeo también señaló que el 71% de encuestados considera que la población LGBTI es una de las que más sufre de discriminación en el Perú.
El motivo principal que impulsó la realización de este estudio se debió a los incidentes suscitados meses atrás, por un par de agentes policiales que presentaron una conducta transfóbica con dos mujeres de la comunidad al retenerlas en la calle y exigirles sus documentos, obligándolas a repetir la frase “quiero ser hombre” mientras realizaban sentadillas. Este humillante hecho ocurrió en la semana que el Gobierno decretó restringir la circulación de hombres y mujeres en días diferentes.
Tras lo sucedido, diversos colectivos LGTBI, activistas trans, congresistas y feministas sostuvieron que este tipo de incidentes solo hacen evidente la problemática que presenta el país con respecto a la inclusión de esta comunidad en la sociedad.
Para Daniela Menes, periodista y especialista en género, esta norma coloca a la población no binaria en una situación de vulnerabilidad. “Preocupa cómo se aplicarán estas medidas en un país sin ley de identidad de género. Esta norma coloca a la población no binaria en una situación de vulnerabilidad”, afirmó mediante su cuenta de Twitter, luego de que el presidente anunciara el decreto.
De igual forma, Gahela Cari Contreras, mujer trans, política y activista por los derechos trans, advirtió, a través de sus redes sociales, que desde el momento en que se anunció esta medida, era muy posible que existiera un alto riesgo de agravio, ya que nada garantizaba que hubiera una concientización por parte de las Fuerzas Armadas o de la Policía sobre el respeto a la identidad de género.
Punto Seguido pudo conversar con Jorge Apolaya, representante del colectivo Marcha por el Orgullo LGBTI de Lima, quien precisa que las actitudes discriminatorias presentes en la cuarentena no sorprenden pues nuestra sociedad, desde hace buen tiempo, mantiene una oposición hacia la comunidad trans, clasificando a sus miembros como personas de segunda categoría. Si bien destaca la labor que ha venido ejerciendo el Ejecutivo, considera que se debe seguir mejorando para beneficio de esta comunidad, la cual ha sido víctima de las malas prácticas policiales en la actualidad. «Este ha sido el primer Gobierno que asume que hay discriminación hacia los trans, pero no es suficiente. La violencia policial se arrastra desde lo que se inculca en los procesos de entrenamiento», indicó.
Asimismo, también se ha visto afectada desde el aspecto social y psicológico, ya que la homofobia y transfobia rehúsan el trato igualitario hacia los ciudadanos trans. Según la psicóloga Raffaella Papi, esto puede repercutir en la sensibilidad de los afectados de forma grave: “Las personas que no son reconocidas por su género desarrollan la disforia de género, que es una tristeza crónica que puede requerir un buen tiempo de recuperación. Obviamente, para que esto suceda, importa el entorno y soporte social que rodeen a esta persona”, señaló.
Esta medida no hizo más que confirmar la inseguridad y el peligro en que se encuentran las personas trans, ya que, en realidad, gran parte de los principales agresores son los efectivos o las instituciones que, en lugar de protegerlas, terminan maltratándolas. En nuestro país, actualmente, no existe una ley que vele por los intereses de ellas.
Revisa la edición número 85 de Punto Seguido para conocer más sobre esta problemática vigente en nuestra sociedad, con el testimonio de tres mujeres trans.