El Dr. Juan Valdiviezo, médico flebólogo certificado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Harvard Medical School en temas relacionados a la prevención y control de infecciones causadas por el COVID-19, nos brinda un diagnóstico de la situación médica del Perú al día de hoy.
“Si queremos realizar una detección temprana es con una prueba molecular. Las pruebas rápidas o serológicas demoran en salir positivas entre 9 y 11 días y no todos resultan positivos en esos días”. FOTO: ANDINA
Escribe: Martín Reyes
Víctor Zamora, titular del Ministerio de Salud, informó el miércoles 22 de abril que mantuvo una reunión con los representantes del Colegio Médico del Perú (CMP), con quienes llegaron a acuerdos para frenar el avance del coronavirus en el país. El primero consiste en sumar esfuerzos conjuntos para el bienestar de la población; el segundo, en el marco de la habilitación de la colegiatura, autorizar temporalmente el ejercicio profesional de médicos extranjeros. Para el Dr. Valdiviezo, la logística de los hospitales del país también requiere de un abastecimiento urgente.
“La realidad actual de los hospitales es que ya están colapsados. Las cifras que maneja tanto el Ministerio de Salud como el presidente no son exactas. Porque en papel te puede aparecer que son 10 camas UCI, pero en realidad puede haber un par que esté malogradas o no esté funcionando. La verdad es que nuestro sistema de salud está saturado. Tampoco hay una correcta implementación de los equipos de protección para todo el personal de salud: no están bien protegidos. Y pese a que el gobierno esté haciendo esfuerzos económicos para conseguir material, este no será suficiente”, señala Valdiviezo.
Asimismo, el pasado 14 de abril, Víctor Zamora, ministro de Salud, afirmó que el Instituto Nacional de Salud (INS) concluyó que las pruebas moleculares y serológicas “tienen la misma eficacia en términos de diagnóstico, tanto individual como poblacional”. Con respecto a estas afirmaciones, el Dr. Valdiviezo manifiesta que el Covid-19 es una enfermedad compleja que tiene distintas fases: asintomática, fase leve parecida a gripe, fase moderada como una neumonía y una severa con una fuerte reacción conocida como tormenta de oxitocinas.
“Las pruebas moleculares detectan de las muestras que se sacan de la nasofaringe, donde entra un palito para sacar un poco de secreción. Desde el segundo día post contacto hasta el séptimo post contacto. Si queremos realizar una detección temprana es con una prueba molecular. Las pruebas rápidas o serológicas demoran en salir positivas entre 9 y 11 días y no todos resultan positivos en esos días. Algunos demoran más, como los ancianos y diabéticos. Por eso las pruebas serológicas sirven para hacer estudios epidemiológicos. Por ejemplo, voy a un distrito, les hago las pruebas y voy cercando el distrito para determinar quiénes están inmunizados y quiénes no para limitar el rango del virus y abriendo los distritos que quiero abrir para reactivar la economía”, afirma Valdiviezo.
Con respecto a la misma problemática que genera la confianza en las pruebas rápidas, en Arequipa, el presidente del Comando COVID-19 señaló que se realizaron cerca de 900 pruebas rápidas donde se arrojaron 4 casos positivos; sin embargo, más allá de enfatizar a los medios sobre las medidas que se aplican en su zona, desvirtúa la confiabilidad de los resultados. Para ello, el Dr. Valdiviezo, quien ya ha manifestado que las pruebas rápidas no son 100% confiables, manifiesta que estas no se vienen realizando en las cantidades que deberían ser tomadas.
“Definitivamente, una proporción de pruebas que debería realizar el país es de 12000 a 13000 al día, pero de estas entre 2400 a 2600 tienen que ser moleculares. Hace ya unos días no se cumple con esta proporción. Eso nos llevará a detectar más tarde a los pacientes y con ello se contagiaran más personas hasta que estos arrojen un resultado positivo”, agrega.
Finalmente, la Comisión de Producción del Congreso pide la reactivación de sectores de bioquímica y textiles por tratarse de una herramienta necesaria para la protección, higiene y limpieza de los peruanos; además de ser una fuente de trabajo para miles de ciudadanos. Sobre ello, el Dr. Valdiviezo cree que, si el Estado dispone de recursos financieros para adquirir más equipamiento médico y para mejorar la infraestructura o comprar más pruebas, deben hacerlo porque todo suma en esta situación crítica.
“Si no hay suficiente oxígeno, hay que producirlo. Ningún paciente debería fallecer por falta de oxígeno. Si no hay suficientes EPP (equipos de protección personal) la industria de plásticos y textiles tiene que producirlos”, finaliza Valdiviezo.