Escrito por: ¿Por qué Misterio sigue siendo tan popular en la audiencia peruana? Tras quince años de su primera emisión, la pasión continúa.
Foto: Andina
Escribe: Maria Luisa Espinoza
En el 2005, el canal de televisión Frecuencia Latina sorprendió con una serie que captó fielmente la pasión por el fútbol. La obra de teatro de Aldo Miyashiro, un biopic en versión libre de Percy Rodriguez, conocido como Misterio. La vida del fundador de la Trinchera Norte se había transformado en un serie de 40 capítulos. La dirección estuvo a cargo del director Jorge Carmona. La historia de un personaje que abandona su camino a una vida exitosa y termina con un balazo en la cabeza. Es también la historia del fanatismo de un país que necesita creer para vivir y utiliza la violencia para seguir creyendo.
Hablar de Misterio, no es solo hablar del líder de la barra más respetada de los amantes del fútbol, sino también es adentrarse en una época de la televisión peruana que no volverá más. De acuerdo con Miyashiro, en una entrevista para el programa «Ventana de Emergencia» de Carlos Orozco, señala: «¿Por qué escribir sobre Misterio? ¿Por qué no escribir sobre otro personaje que se más positivo, que tenga una luz más clara? Y mi respuesta era la misma: Me parecía absolutamente dramática la historia de este muchacho».
Pasión en la pantalla
Carmona y Miyashiro estaban haciendo un pilo de una serie. Jorge fue a la función «Un misterio, una pasión». Hicieron un piloto con ayuda de ANTENA 3. El piloto era para un canal de cable, se lo mostraron a ANTENA 3. En esa primera edición, Sergio Galliani era Misterio. El canal de cable rechazó el proyecto, pero la serie fue comprada en Frecuencia Latina. Misterio se mantuvo con recursos mínimos: los actores se cambiaban en la calle, las escenas eran en exteriores. La dirección de Jorge Carmona utilizó el formato «handycam» para darle mayor realismo la historia. Además fue el debut actoral de Pietro Sibille y Aldo Miyashiro.
Se realizó un estudio de mercado. Miyashiro señala que una consultora de marketing le dijo que no iba a funcionar, y dos gerentes de Frecuencia Latina le señalaron lo mismo. Un mes antes del estreno de la serie fueron avisados de su posible de despido. Ni bien estreno Misterio, la serie esteralizó el horario «primetime», compitiendo con programas como Magaly Teve. Misterio también se visitó de un selecto soundtrack rock peruano con artistas como Cuchillazo, Ni voz ni voto, Inyectores, D’Mente Común, Daniel F, Santiago Pillado-Matheu, entre otros.
#MISTERIO ¦ La mejor frase del primer capítulo. Etiqueta a aquella persona que se ve preciosa con algo de #Universitario. pic.twitter.com/6orfkQa9P4
— Opinión Crema (@OpinionCrema) June 7, 2020
Misterio y sus lectores
En el 2009, Aldo Miyashiro publicado la obra de teatro «Un Misterio, una pasión», bajo la tutela de la editorial Estruendomudo. Durante la presentación del Libro en la Feria Internacional de Libro de Lima de ese año, el aforo está lleno y el tiraje de mil ejemplares se vendió en su totalidad. La hazaña conmovió a los hinchas y televidentes de ese hincha de Universitario que solo pudieron ver en 40 capítulos. Un representante de la Cámara Peruana del libro, llamó asombrado a Miyashiro para comentarle sobre el éxito de su ópera prima.
Nueve años después, la editorial Peguin Random House publicó una segunda edición. En la portada se encontraba el el actor Sebastián Monteghirfo, el nuevo Misterio elegido por el director de la obra Juan Carlos Fisher para la reposición por decimoquinto aniversario desde su primera presentación en el teatro de la Alianza Francesa. El libro fue presentado en la Feria Internacional del Libro de Lima en el 2018.
Ediciones de Estruendomudo y Penguin Random House. Foto: Megustaleer
La imagen de portada de «Un misterio, una pasión» pertenece a la escena 26. Luego de dispararse jugando la ruleta rusa, aparece Misterio ensangrentado con la herida de bala en la cabeza y dice: «Y ya no puedo. Nunca más. Porque tenía que irme. Así. Y me fui». Esta escena representa el arrepentimiento e iluminación personal del fundador de la Trinchera Norte. La serie no solo fue única en su tipo sino representó un acto «sui generis», que desde hace quince años, sigue contando su historia.
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