Escribe: Jhassira Sulca
En la actualidad, y gracias al desarrollo de la cirugía estética, las personas pueden modificarse a voluntad casi todos los elementos de su apariencia. Estos cambios contribuyen a una variable de gran importancia para comprender el funcionamiento psicosocial de las personas.
Muchas personas suelen someterse a procedimientos estéticos que tienen como objetivo la corrección de anormalidades de causalidad congénita, adquirida, tumoral o evolutiva. Estas anomalías se pueden presentar en diversas partes del cuerpo. Estos tratamientos pueden ayudar a reconstruir la apariencia del paciente mediante prácticas poco invasivas.
En este sentido, de acuerdo a un estudio realizado en el 2021 por la Academia Estadounidense de Cirugía Reconstructiva Plástica y Facial (AAFPRS por sus siglas en inglés), los procedimientos plásticos habrían aumentado desmesuradamente en comparación con años anteriores, y solo hablando de la población americana. Lo novedoso de este estudio es que la generación de los millennials es la que más se ha estado sometiendo a cirugías plásticas en comparación con datos de otras generaciones como la X y los Baby Boomers.
En la misma línea, el portal de estadística en línea alemán, Statista, realizó un estudio de los países con mayor porcentaje de operaciones de estética y cosmética por país en 2020 donde se evidenció una creciente expansión de estos procedimientos a nivel global. Los últimos datos disponibles demuestran que Brasil ocupa el segundo lugar después de Estados Unidos. Además, señala que la operación realizada a nivel mundial con mayor frecuencia es la mamoplastia de aumento (1,6 millones de operaciones), seguida de la liposucción y la blefaroplastia.
Fortune Business Insights registró que el tamaño mundial del mercado de la cirugía estética fue de 50 670 millones de dólares en 2018 y prevé que alcance los 66 960 millones de dólares en 2026.
Pero, ¿a qué se debe el incremento de la demanda? Según estudios científicos, como ‘la importancia de la apariencia personal en el funcionamiento psicosocial’ del Dr. Raúl Ángel, señalan que las cirugías estarían relacionadas con el bienestar psicológico de la persona en cuestión, dado que la apariencia personal constituye una variable de gran importancia para comprender el funcionamiento psicosocial de las personas.
En diálogo con la socióloga Milagros Ñique para Punto Seguido, nos comenta que el impacto en el bienestar psicológico de la persona solo se daría en caso de que el sujeto presente algún antecedente de problemas psicosociales, esto a raíz de la creencia de sentirse menos atractivo que el promedio de individuos, el cual genera una disminución en la autoestima y la valoración de sí mismo. Las personas que se han realizado una cirugía estética evidencian un aumento en sus niveles de satisfacción, pero durante un corto periodo de tiempo.
En relación a la influencia de la sociedad y los medios, Ñique sostuvo que aunque vivamos bajo los estereotipos impuestos por la sociedad, ya sea de acuerdo a nuestro comportamiento o de acuerdo a nuestras actitudes sociales, la individualidad de los ciudadanos en su toma de decisiones se ha ido fortaleciendo con el paso de los años, por lo tanto no se debería asumir que la influencia para realizarse procedimientos estéticos solo nace a partir de los estereotipos, sino también a raíz de la libertad e individualidad de cada ser humano.
“Las intervenciones a nivel de cirugía estética son decisiones personales, actualmente, las redes sociales y los medios han agilizado esa inquietud de intervención por parte de los jóvenes”, señaló Ñique sobre la influencia de los medios en las cirugías.