La oración, la penitencia y la misericordia fueron las principales encomiendas del Sumo Pontífice en la carta enviada a los peruanos dentro del marco de la conmemoración por los 400 años del fallecimiento de la Patrona de América.
Redacción: Alexandra Ojeda
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La celebración de la fiesta de Santa Rosa de Lima fue el escenario elegido por el Papa Francisco para exhortar a todos los creyentes católicos a poner en práctica los dones de la fe representados en nuestra santa peruana. A través de un escrito pronunciado por su enviado especial, el Cardenal Raúl Eduardo Vela Chiriboga, el Santo Padre resaltó la importancia de la oración, la penitencia y la misericordia.
“El rosario es la oración que acompaña siempre mi vida” fue el testimonio que el Papa Francisco compartió con el Arzobispo Emérito de Quito para dar a conocer su relación con la plegaria. Entendida como una manifestación de agradecimiento a Dios, el purpurado ecuatoriano invitó a los asistentes a mantener este vínculo de fe, tal como lo hizo Santa Rosa de Lima.
Asimismo, destacó la necesidad de la confesión como práctica constante. “La penitencia es el esfuerzo humano que responde a la gracia de Dios y el medio por el cual este purifica su vida” afirmó Vela Chiriboga ante los cientos de fieles y miembros de los diferentes regimientos de la Policía Nacional del Perú (PNP), quienes tienen como patrona a la primera santa de América.
Finalmente, reconoció el valor de la misericordia como don esencial en la vida de cada cristiano. “Ser misericordioso es tener un corazón compasivo, sensible y clemente” sentenció el Cardenal durante los últimos minutos de la Solemne Misa de Clausura del Año Jubilar.
Silencio sobre su visita
Pese a la gran expectativa que generó la misiva del Sumo Pontífice, esta no hizo referencia a su próxima visita al Perú en enero del 2018. Sin embargo, resaltar las principales cualidades de Santa Rosa de Lima e incentivar a seguir su ejemplo fue bien recibido por sus fieles más devotos.
