El 8 de febrero del 2021, arribó a nuestro país el primer lote de vacunas contra la covid-19. Un total de 300,000 dos de vacunas del laboratorio Sinopharm, este fue uno de los acontecimientos más esperados por los peruanos y sucedió durante el gobierno del ex presidente Francisco Sagasti. La distribución de las vacunas se inició el 9 de febrero y de acuerdo al plan de vacunación previsto, las campañas se iniciarían primero en Lima, el Callao y los departamentos con mayor riesgo de exposición al virus. De inmediato se iniciaron campañas publicitarias de información acerca de la vacuna, sus efectos y la función que cumplía una vez aplicada. Los medios de comunicación también contribuyeron con la campaña de información sobre las vacunas, con la finalidad de incentivar a que las personas tomen confianza y no desistan de aplicarse las dos dosis de vacunas.
En el Perú al día de hoy se registra un total de 8.720.455 personas con ambas dosis aplicadas. Sin embargo, pese a los esfuerzos por lograr que la totalidad de personas de los rangos de edad ya vacunados y en proceso de vacunación se apliquen ambas dosis, este aún es un camino un tanto tedioso. Esto es, debido a que, pese a toda la información disponible sobre las vacunas, existe una muy grande campaña de desinformación con mitos urbanos y de todo tipo sobre los efectos de la vacuna y del tipo de vacunas que se trajeron al Perú.Además, existen otros problemas que suman a la poca asistencia de las personas a los vacunatorios.
De acuerdo con una entrevista realizada al epidemiólogo Edward Mezones Holguin, aún existen deficiencias en las campañas de vacunación como, largas colas y aglomeraciones. Esto ha sido contraproducente al momento de vacunar al grupo de adultos mayores quienes tuvieron que asistir desde muy temprano y esperar a ser atendidos pero, por su condición esto resultó muy complicado.
Otro problema sería que los puntos de vacunación están ubicados en lugares a donde no todas las personas tienen acceso. Esto se evidencia más en zonas rurales Además, Mezones explica que está siendo muy complicado llevar la cuenta de la cantidad de dosis recibidas por cada persona. Explica también, que muchas de las personas no saben que tienen que volver a ser vacunadas.
Pese a tener información, las personas han generado sus propias hipótesis sobre la vacuna y esto nos lo comenta el Dr. Ciro Recuay quien explica:
“Han venido muchos pacientes a decirme que la vacuna es solo agua o sienten mucha desconfianza al enterarse de que serán vacunados con la dosis del laboratorio Sinopharm y lamentablemente no tenemos alcance en toda la población. Es por eso que quizá tengamos que pagar las consecuencias de los muchos problemas que presentan estas campañas de vacunación”
Un conjunto de factores sociales y competentes con la implementación de medidas por parte del sistema de salud nacional, son los responsables de cierta forma de la poca asistencia de las personas a los vacunatorios. Esperemos que estos problemas mejoren y se pueda llegar a vacunar por lo menos al 50% de la población total del Perú. De esta manera, con el mejor funcionamiento del sistema de salud y brindando más información a las personas propiciar la asistencia de estas a los locales de vacunación.