La bailarina, cantante y ahora actriz, después de su gran interpretación de ‘Vanessa’ en En el barrio, estará en el musical más esperado en Lima, Mamma Mía. Tendrá el papel de Aly, la amiga de Sophie, personaje principal interpretado por Gisela Ponce de León. Verónica nos cuenta cómo desde su profesión como bailarina ha llegado al mundo de los musicales, consiguiendo un papel protagónico con puro talento.
¿Cómo empezaste en el mundo de los musicales?
Mi primer musical profesional fue La Novicia Rebelde a los 10 años con Denisse Dibos. No volví a hacer teatro musical hasta los 22 años. Denisse fue a preguntar a Vania Masías si tenía alguna chica de su elenco que cante y baile, para su nueva producción musical Cabaret. Vania me recomendó a mí y Denisse le dijo: “¡pero ella tiene 10 años!” (risas). Ella tenía ese recuerdo en su corazón de mi chiquitita y el papel era de prostituta, o sea, nada que ver. Vania le dijo que yo era profesora de Sexy Dance y que me probara. Denisse lo hizo y me quedé trabajando con ella un montón de años.
Con aquel episodio, ¿D1, la Asociación Artística de Vania, entra al mundo de los musicales?
Sí, yo fui la primera de D1 que hizo un musical con Denisse Dibos. Cuando ella ve que yo cantaba, bailaba y dominada varios estilos; me preguntó: “¿Hay más como tú?”; como si fuéramos una especie (risas). Yo le dije que sí, que éramos un montón. A raíz de esto, ella decide hacer el musical 2010, donde D1 se encargaba de las coreografías. Yo me pasaba de un bando a otro, lo que era bailado lo hacía y lo cantado también. En toda la obra, la pasaba cambiándome de vestuario para entrar en escena. Ahí D1 entra al mundo de los musicales y ahora, como productora, ofrece a bailarines para las obras. En esas épocas los bailarines no conocían mucho el tema musical. Los de otras generaciones nos preguntaban: “pero, ¿qué hacen?”. Ahora, todos quieren hacer teatro musical. Se forman, estudian… Y es bacán. Siento que, de alguna manera, aunque ellos no lo sepan, fui parte del primer empujoncito para que ese interés suceda.
Eres bailarina de profesión, pero, además, tienes una voz muy poderosa, ¿Has llevado algún estudio de canto?
Mi entrenamiento como cantante ha sido en las obras. Te entrenan antes de estrenar. Así he ido encontrando y trabajando mi voz. De hecho, no he cantado de la nada en esta obra. Sí tenía un conocimiento, pero no puedo decir que he estudiado canto. Lo que sí, nunca había cantado tanto en un escenario. Andrea De Martis me entrenó para esta obra. He llegado a notas que nunca me hubiera atrevido a cantar.
Verónica como actriz, ¿Cómo te sientes en esta nueva faceta?
La actuación es lo que yo siento que debo trabajar más. A mí me encantan los musicales, porque puedo juntar las tres cosas que me gustan. En sí, los papeles de los musicales no son muy profundos, porque va por el lado de contar la historia, mostrar el show y el baile. Para hacer otros personajes quiero meterme a estudiar más. Me gustaría estar en una obra convencional. Eso me ayudaría a ser mejor actriz. Me daría mucho miedo, pero si se presenta la oportunidad, sí lo haría.
¿Qué significó para ti estar En el barrio y tener el papel de Vanessa?
Después de haber hecho de Vanessa, puedo morir en paz. Era mi sueño. Yo llegué a la lectura y ya me sabía todas las canciones. Yo estaba preparada para ser Vanessa, solo que me daba mucho miedo. No me imaginé que en verdad iba a pasar. Yo no me sentía preparada para hacer un personaje tan grande, pero Bruno me dijo: “yo te voy a ayudar”. A él le debo todo el tema de guiarme en la actuación. Él ha tenido paciencia conmigo.
¿Podrías decir que En el barrio es tu musical favorito?
Sí, por varios motivos. In the Heights (nombre original de En el barrio) es mi musical preferido en la vida. A mí me gusta el teatro musical, pero a veces me canso un poco del jazz. No me llena al 100%. Cuando yo fui a New York y vi este musical; primero, estaba en spanglish y era de inmigrantes latinos; segundo, yo soy dominicana y siempre he tenido el tema de que soy de aquí o de allá, no sé de donde soy; y tercero, tenía salsa y hip hop. ¡Yo quiero que todos los musicales sean así! Además, he subido al escenario y trabajado con varios chicos del Original Cast. ¡Eso no me ha pasado con ninguna otra obra! Cuando vi el personaje de Vanessa me enamoré. Era un personaje fácil de identificarme.
¿Cómo te sientes después del éxito que ha tenido tu interpretación de Vanessa?
Hay gente que me dice que me va a cambiar la vida. La verdad es que no siento nada (risas). Me siento la misma persona. Sigo haciendo mi rutina, limpiando y cocinando en mi casa. Yo hago mi vida normal y estoy esperando a que suceda algo, si no, también seguiré normal con mi vida. No estoy concentrando mis energías para algo en específico. Siento que he ‘chambeado’ un montón y estoy contenta con las cosas que me han pasado. Creo que cada cosa llega a su tiempo y por eso, ha sido el momento preciso para interpretar este papel. Igual, yo disfruto ser ensamble. No era mi objetivo tener un protagónico. Ya fui Vanessa, no busco más.
Ahora serás parte del musical Mamma Mia, que se estrenará en junio. ¿Cómo te va en los ensayos?
Van bien. Es locazo, porque ahora me llaman como personaje y yo siempre he sido ensamble. Todo bien si me llaman como ensamble. No es que yo diga que soy actriz. Es más, yo no me siento actriz. Juan Carlos, el director, me quiere dar esta oportunidad, pero igual estoy bailando un montón. Me siento bien, porque siento que estoy dando un paso más, pero sin dejar de hacer lo que me gusta.
Después de haber participado en En el barrio, tu musical favorito, ¿cómo te sientes en esta nueva obra?
Mamma Mia me gusta como obra. No es mi favorita, pero es la más vista a nivel mundial. Es una obra simple, pero que tiene mucho poder. Yo creo que ha funcionado por su simpleza. La obra, en sí, tiene una magia especial. Además, siento que estoy haciendo algo importante en el Perú, porque es la primera vez que se hace la obra. Eso va a ser como un concierto, porque en En el barrio nadie canta las canciones, ya que nadie se las sabe, pero en esta obra todo el público va a cantar. Entonces, esa energía es la que me empila en esta obra.